domingo, 26 de julio de 2009



Sacado de la biografía del dramaturdo Pierre Corneille en Wikipedia, la enciclopedia libre:

"Al final de su vida, la situación de Corneille es tan mala, queno tiene ni para chuches" (sic)

Uno se imagina al pobre autor de Medea, por las calles de París gritando "¡mi vida por una nube! ¡Mi obra por unos oseznos de gominola"


Aquí le dejamos algunos por si quiere venir a recogerlos, son totalmente gratis, en este blog somos así:


viernes, 17 de julio de 2009



Me encanta esta rutina de Buster. Es la típica rutina que va in crescendo, un gag te lleva a otro en un ritmo constante de forma natural, casi ni te enteras, y de repente te estalla la risa. Keaton, era el maestro de este tipo de escenas; algunos de sus cortos mudos ni siquiera tienen argumento, es un dejarse llevar de situación a situación, pienso por ejemplo en Pamplinas nació el día 13, empieza con Buster intentando suicidarse, luego va de pesca, luego lo contratan para cazar un armadillo y acaba defendiendo un club de vacaciones de unos mafiosos malvados. Esto en otro cómico de la época, por ejemplo Larry Semon, sería un continuo saltar de gag en gag, pero en Buster siempre hay un algo (se llama construcción, creo) que te hace pensar que el absurdo es natural, que el surrealismo no es forzado y que pasa porque tiene que pasar.

Esta rutina que a mí me gusta tanto, es parte de la película Pest in West, de 1939. Es la primera que hizo en los estudios Columbia, y según dicen los expertos, la mejor. La Columbia estaba especializada en cortos cómicos que se hacían en cadena, muy rápidamente y de forma muy barata, el tipo de humor que se llevaba allí era violento y a veces más basado en el subrayado sonoro de los gags que en el gag en sí (sólo hay que ver cualquier corto de los Tres Chiflados) Buster no lo pasó bien en este estudio, el ritmo de producción no le dejaba preparar su trabajo como a él le gustaba, con el tiempo habló muy mal de estas películas, pero pudo darnos en ellas algunas joyas como esta que estamos viendo.

La mayoría de los libros de historia se equivocan con Buster, no fue ni el alcohol ni el sonoro lo que acabó con su carrera. Él seguía siendo el mejor constructor de gags de la historia de la comedia, como en sus películas, era el mundo que había a su alrededor lo que empeoraba, no él. Siguió creando gags tanto para otros cómicos como para sí mismo, y trabajó en lo que más le gustaba hasta el día de su muerte. Igual soy yo, pero yo no creo que eso sea estar acabado, eso es sobrevivir, lo cual en Buster era tan natural como el triunfo.

jueves, 2 de julio de 2009



Qui comincia la sventura dil signor Bonaventura.

Con este pequeño verso empezaban todas las aventuras/desventuras de un personaje de historieta que debutó en el Corriere dei Piccoli en 1917: El Señor Bonaventura; cuya indumentaria y modos podían haber sido prestados por cualquier máscara de la Commedia dell Arte.

Lunático, despistado, eternamente asombrado ante un mundo salido de un teatro de Guiñol, acompañado siempre por su simpático y curioso perrito o, a veces, por un hijo que es igual que él pero más bajito; las surrealistas historietas de este personaje acababan con la entrega de un vale de un millón, recompensa que aparecía como un regalo de la suerte, porque Bonaventura envuelto en sus propias tonterías y payasadas nunca hacía ningún esfuerzo para merecersela.

Sergio Tofano, que firmaba como Sto, era el autor de este mundo lleno de movimiento ilógico que volvía loco a los futuristas italianos de aquella época. Era además de dibujante, un hombre de teatro, dándole carne al personaje de tinta que él mismo creó. Primero, en muchas funciones de variedades en el que él aparecía como Bonaventura dibujando sus personajes como regalo al público y después con un espectáculo interpretado, dirigido, escrito y escenificado por él mismo que se llamaba precisamente "Qui comincia la sventura" y que se estrenó el 19 de abril de 1927. Es el principio de una carrera más allá de las páginas del Piccolo: cinco espectáculos teatrales, una película (en 1942) e, incluso, algunos discos. Así describe a Sto, Claudio Bertieri en la Historia de los Cómics de Toutain:

Estrafalario, Estrambótico, funambúlico y visionario, sigue siendo el máximo protagonista de la historieta cómica italiana por su vivacidad, su gracia, su inteligencia y su fantasía. Es, durante un tiempo, uno de los grandes personajes del teatro nacional.

Toda esta entrada no tendría sentido si no hubiera encontrado en youtube el siguiente video, una aparición de Sergio Tofano en la televisión italiana recreando una de las aventuras de Bonaventura. Me alegra ver como su actuación está tan cerca del payaso, afianzando mi convicción de que el payaso y el personaje de cómic de humor están muy cerca. Con esa caracterización que lo convierte en una suerte de muñeco, que podría estar la mar de cómodo con Guiñol o Mr Punch (o mejor: ¡Con Pinocho!) en un teatrillo de marionetas. Es por eso que me apetece tanto que Sto inaugure la sección de videos de este blog