viernes, 17 de julio de 2009



Me encanta esta rutina de Buster. Es la típica rutina que va in crescendo, un gag te lleva a otro en un ritmo constante de forma natural, casi ni te enteras, y de repente te estalla la risa. Keaton, era el maestro de este tipo de escenas; algunos de sus cortos mudos ni siquiera tienen argumento, es un dejarse llevar de situación a situación, pienso por ejemplo en Pamplinas nació el día 13, empieza con Buster intentando suicidarse, luego va de pesca, luego lo contratan para cazar un armadillo y acaba defendiendo un club de vacaciones de unos mafiosos malvados. Esto en otro cómico de la época, por ejemplo Larry Semon, sería un continuo saltar de gag en gag, pero en Buster siempre hay un algo (se llama construcción, creo) que te hace pensar que el absurdo es natural, que el surrealismo no es forzado y que pasa porque tiene que pasar.

Esta rutina que a mí me gusta tanto, es parte de la película Pest in West, de 1939. Es la primera que hizo en los estudios Columbia, y según dicen los expertos, la mejor. La Columbia estaba especializada en cortos cómicos que se hacían en cadena, muy rápidamente y de forma muy barata, el tipo de humor que se llevaba allí era violento y a veces más basado en el subrayado sonoro de los gags que en el gag en sí (sólo hay que ver cualquier corto de los Tres Chiflados) Buster no lo pasó bien en este estudio, el ritmo de producción no le dejaba preparar su trabajo como a él le gustaba, con el tiempo habló muy mal de estas películas, pero pudo darnos en ellas algunas joyas como esta que estamos viendo.

La mayoría de los libros de historia se equivocan con Buster, no fue ni el alcohol ni el sonoro lo que acabó con su carrera. Él seguía siendo el mejor constructor de gags de la historia de la comedia, como en sus películas, era el mundo que había a su alrededor lo que empeoraba, no él. Siguió creando gags tanto para otros cómicos como para sí mismo, y trabajó en lo que más le gustaba hasta el día de su muerte. Igual soy yo, pero yo no creo que eso sea estar acabado, eso es sobrevivir, lo cual en Buster era tan natural como el triunfo.

4 comentarios:

  1. Genial, me encantan los gags de Slapstick cuanto más violentos mejor, y si estan tan bien montados como este y con el arte que le pone este señor mejor. Los gestos faciales que hace me flipan, como cuando despues de recibir unos cuantos golpes, ya le duele hasta tocar las notas del ostiazo que se ve venir.
    El texto como siempre muy xulo yordis, me jode un poco entrar y decir "qué tochazo, mola" para luego leermelo en un titá (-_-)

    MÁS!

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  2. Debes ser de las pocas personas que le gustan los textos largos en los blogs... pero mola, la verdad es que me anima a seguir escribiendo y soltando rollazos descomunales (bueno, al final no lo es tanto, no sé por qué mis ideas acaban super resumidas en los textos, mejor, imagino)
    Me alegro que te mole Buster, como ves he hecho una etiqueta sólo para sus "rutinas" y espero llenarla con muchas cosas.
    :)

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  3. Mola el blog, el como una continuación de aquel en el que explicabas la dinámica del payaso serio y el alegre, que ahora no me acuerdo como eran los nombres técnicos, bueno, es igual... que el entusiasmo te acompañe!

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  4. Hola, master, sí, es como una continuación de los Payasos en la oscuridad esos, es un poco lo que quería hacer, pero con más tiempo, y un poco más tranquilamente... Algunas entradas de aquel blog me gustaban como quedaron, algunas otras no tanto.
    Ah! Que el blog de dibujos no lo mato, no te vayas a pensar... Sólo es un tiempito que me tomo... y lomo.
    :O)

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